La motivación es el motor impulsor que nos permite hacer lo que nos proponemos. La demostivación, en cambio, es la pérdida de entusiasmo, disposición y ganas, lo que genera una desesperanza y un pesimismo que bloquean nuestra parte emocional. Como consecuecia de ello, existe pérdida de interés por cubrir nuestras necesidades básicas (alimento, aseo,…), comienza a haber pensamientos negativos sobre uno mismo y el entorno, irritabilidad y cambios anímicos notables, y hasta cambio en las rutinas del sueño.

 

* Por qué una persona se desmotiva…

• • Por miedo: Cuando tenemos miedo, la desmotivación y la pérdida del entusiasmo pueden actuar como un mecanismo de defensa que intenta protegernos.
  • Por causas extrínsecas: La presión social, por ejemplo, desmotiva debido a que actuamos en base a los intereses y necesidades de otros, más que por los nuestros.
  • Por replanteamiento de nuestras necesidades: A lo largo de la vida las necesidades cambian, pero puede que las metas no, lo que genera un desequilibrio entre el camino escogido y el objetivo a conseguir.
  • Por no tener metas claras: Si no existen objetivos bien claros y/o alcanzables, el esfuerzo no es recompensamos como creemos, lo que genera frustración, por tanto, desmotivación.
  • Por falta de retos: Necesitamos ponernos a prueba para crecer como personas y ganar independencia y autonomía.
  • Por aburrimiento: La rutina a largo plazo, en cualquier ámbito, puede generar desinterés y apatía. 

 

TIPOS DE DESMOTIVACIÓN

• Laboral. La falta de avance en el trabajo, los problemas de comunicación, un mal clima laboral, la escasez de autonomía y la inseguridad son algunos de los factores que llevan a una merma en este ámbito.
• Escolar. Es la principal causa de fracaso escolar. El bullying, no cumplir las necesidades educativas, a veces los métodos erróneos o la falta de apoyo en casa, pueden generar desinterés y apatía por el émbito académico.
• De pareja: Normalmente, uno de los miembros pierde el interés en la relación y se vuelve apático e indiferente, rompiéndose así el lazo emocional que los unía. Si no se soluciona, puede llevar a la ruptura de la pareja.
• Desmotivación existencial. ¿Cuál es mi objetivo vital? ¿Qué haré con mi vida? ¿Qué sentido tiene vivir si vamos a morir? Cuando una persona se hace estas cuestiones continuamente, quizá esté en un periodo de desesperanza y tristeza que, si no se revierte, puede desencadenar una depresión.

 

CONSECUENCIAS

La desmotivación no siempre es algo negativo, sino que puede servir como indicativo para reflexionar y cambiar el rumbo si lo que hacemos no nos satisface y/o nos genera infelicidad. Sin embargo, cuando es una tendencia estar desmotivado, es peligroso, pues puede generar afectación tanto física como psicológica. Además, estar desmotivado limita nuestra capacidad para relacionarnos, merma la fuerza de voluntad, y provoca el encierro en uno mismo y aislamiento.

 

TRATAMIENTO

El coaching es la tendencia que mejor está funcionando para trabajar la motivación. Con ello se consigue:

• Determinar objetivos con mayor claridad.
• Encontrar las verdaderas pasiones e intereses que nos mueven.
• Aumentar la autoconfianza y la autoestima.
• Eliminar el bloqueo emocional que impide alcanzar las metas.